viernes, 16 de noviembre de 2012

Ideas precursoras del falsacionismo en Ramiro Ledesma



 Algunos años atrás quedé francamente sorprendido cuando leí algunos artículos filosóficos de un joven discípulo de Ortega y Gasset, Ramiro Ledesma Ramos (1905 - 1936), primero escritor y filósofo, con una sólida formación matemática, y luego volcado a la actividad política en aquellos agitados años 30 del pasado siglo, de trágicos y bien conocidos acontecimientos. Él mismo perdió la vida, sacado de la cárcel y asesinado, en el sangriento año de 1936. Nuestro país perdió, sin duda, a una mente privilegiada ("no han matado a un hombre, han matado a un entendimiento" dijo su maestro, Ortega).


[Ramiro Ledesma, joven intelectual español de los años
 20 -30 del siglo XX. Fuente de la imagen:


Escribió el joven filósofo zamorano un puñado de buenos artículos sobre filosofía y ciencia, colaborando en La Gaceta Literaria y en Revista de Occidente, entre otras prestigiosas publicaciones de la época. Entre ellos destaca La Filosofía, disciplina imperial, de 1931, donde Ramiro Ledesma (en estas notas para una fenomenología del conocimiento filosófico) nos explica en  qué consiste el proceso de creación científica: “Tal cosa, o teoría, que hoy se admite por los sabios, demuestro que es imposible, que es falsa. Mi contribución positiva a la marcha de la ciencia es esa demostración negativa de imposibilidad. Ahora bien: si una teoría  es debelada  por mí, vengo obligado a construir otra, a afirmar otra que suplante a aquélla. El único asidero de legitimidad para mi construcción es realmente que triunfa de mis críticas a la teoría antigua”. Esto, según Ledesma, conduce a una paradoja  inherente a la propia ciencia: “La  mayor prueba de que  una teoría científica es verdadera -legítima-  consistirá precisamente en que pueda ser refutada algún día. Su parte afirmativa adquiere tan sólo entonces sabor científico genuino”. Sin embargo, el joven pensador zamorano nos aclara oportunamente: “Esto en cuanto a lo que la ciencia tiene de teórico, que es de donde proceden sus habituales confusiones con la filosofía. Pues su estricto matiz experimental, atenido a esto que ahora observo, aunque le confieran mis métodos validez universal y firmeza absoluta, no despierta peligro alguno de esa  índole”. ¿No es esto acaso falsacionismo en estado puro?


Vemos pues aquí cómo Ramiro Ledesma esboza una tesis falsacionista concordante con la de Karl Popper, quien estableció la refutabilidad o contrastabilidad como criterio de demarcación entre ciencia y pseudociencia y, con posterioridad, entre aquélla y la metafísica. Esta idea fundamental del vínculo entre la legitimidad (o autenticidad) de una teoría científica y la posibilidad de su refutación ya es advertida por Ledesma en 1929 (El causalismo de Meyerson). Recordemos que no es hasta 1934 cuando Popper expone claramente  su tesis de la refutación en  Logik der Forschung (Lógica de la investigación científica). En esto, como en tantas otras cosas, Ramiro Ledesma fue un precursor.

[Primera edición de Logik der Forschung, de POPPER.
Procedencia de la imagen aquí]

Relación de artículos de Ramiro Ledesma con interés científico (sobre matemáticas, física, filosofía de la ciencia, teoría del conocimiento y otros):

[Nota: Se emplean las abreviaturas LGL para La Gaceta Literaria y RO para Revista de Occidente]


1928:

(1)        El matemático Rey Pastor (LGL, nº 30, 15 de marzo).
(2)        Descartes y el idealismo subjetivista moderno (LGL, nº 38, 15 de julio).
(3)        Recensión  del libro Espacio, hiperespacio y tiempo, de Francisco Vera (LGL, nº 40,        
            15 de agosto).
(4)        Hans Driesch y las teorías de Einstein* (LGL, nº 44, 15 de octubre).
(5)        El profesor Carrasco y la filosofía  de la Mecánica (LGL, nº 46, 15 de noviembre).
(6)        El matemático indio, S. Ramanujan (LGL, nº 46, 15 de noviembre).
(7)        Rey Pastor y el sabio italiano Enriques (LGL, nº 46, 15 de noviembre).
(8)        Las lecciones de Cabrera sobre el átomo (LGL, nº 47, 1 de diciembre).

1929:

(9)        La Gestalttheorie (LGL, nº 50, 15 de enero).
(10)        Sobre la matemática transfinita (LGL, nº 50, 15 de enero).
(11)        El profesor Butty (LGL, nº 52, 15 de febrero).
(12)        André Metz y la Geometría Euclidiana (LGL, nº 54, 15 de marzo).
(13)        De la nueva psicología (LGL, nº 54, 15 de marzo).
(14)        Hertwig y el postdarwinismo (LGL, nº 55, 1 de abril).
(15)        La actualidad de Cournot (LGL, nº56, 15 de abril).
(16)        Bertrand Russell: Análisis de la materia* (RO, nº 71, mayo).
(17)        Lógica y matemática (LGL, nº 61, 1 de julio).
(18)        El causalismo  de Meyerson* (RO, nº75, septiembre).
(19)        Francisco Vera: Evolución del concepto de número (LGL, nº 72, 15 de diciembre).
(20)        La fenomenología en España (LGL, nº 72, 15 de diciembre).
(21)        En la Academia de las Ciencias (LGL, nº 72, 15 de diciembre).

1930:

(22)        Las sensaciones táctiles* (RO, nº 84, junio).
(23)        Esquemas de Nicolai Hartmann* (RO, nº 89, noviembre); sobre gnoseología.
(24)        Sobre la filosofía del Renacimiento* (RO, nº 90, diciembre).

1931:

(25)        La filosofía, disciplina imperial (Notas para una fenomenología  del conocimiento               
           filosófico)* (El Sol, 22  de septiembre).  

(Nota: Los artículos señalados con un asterisco forman parte del libro La filosofía, disciplina imperial, Tecnos, Madrid, 1982; este libro es reedición de Escritos filosóficos, título que se le dio en 1941, donde se recogen una serie de artículos de Ramiro Ledesma, seleccionados por él mismo. Las dos ediciones incluyen el estudio preliminar de Montero Díaz : La evolución intelectual de Ramiro Ledesma)

2 comentarios:

José Manuel dijo...

Lo peor de R. Ledesma es, como en todo filósofo de la ciencia, mezclar ciencia e ideología. La ciencia no se basa en ideas preconcebidas.

Saludos

Bernardo Rivero dijo...

Una cosa es hacer ciencia y otra muy diferente es reflexionar sobre ella y analizarla y escrutarla como haría un filósofo, desde afuera. Por eso dice Ledesma que la Filosofía es una disciplina "imperial".
Un saludo y gracias por el comentario.