[Fuente de la imagen: aquí]
Los británicos emplearon la técnica de transferencia nuclear de la célula somática, consistente en extraer el núcleo de una célula somática adulta (en el caso de Dolly una célula de una gándula mamaria de una oveja donante) e introducirlo en un óvulo desprovisto de su núcleo. Después de dotar al óvulo con el núcleo de la célula adulta (con toda la información genética de esta, con su ADN) los investigadores del equipo de Edimburgo estimularon la división celular mediante la aplicación de descargas eléctricas. El desarrollo del embrión en otra oveja daría lugar, finalmente, al nacimiento de la oveja clonada, Dolly, genéticamente idéntica a la oveja donante del núcleo de célula adulta. Aclaremos que aunque Dolly tenía el mismo ADN nuclear que la célula adulta de la oveja donante su ADN mitocondrial (que es extranuclear) provenía de la oveja utilizada para proporcionar el óvulo (desnucleado) receptor. Por supuesto, no hay tarea fácil en la ciencia y menos en un asunto tan delicado como este. Fueron necesarios 277 intentos hasta que los investigadores del Instituto Roslin de Edimburgo gritaron su particular eureka.
Y como sucede tantas veces en la investigación el caso de Dolly tiene su punto chusco. Puesto que la célula somática adulta se había obtenido de una glándula mamaria de una oveja, los británicos Campbell y Wilmut tiraron de humor isleño y dieron a la oveja obtenida por clonación el nombre de Dolly, en homenaje a la gran cantante de country Dolly Parton, de abrumadora delantera.
Os dejo un divertido vídeo de introducción a la clonación hecho por alumnos de bachillerato y una muestra de la música de la cantante de poderosos pechos, Dolly Parton:
Para saber más: 50 cosas que hay que saber sobre genética; MARK HENDERSON; Ed. Ariel.